Autor: Noemí Levy, Experta en Marketing y Comunicación.

Israel celebra su 65 Aniversario. 65 años de independencia, democracia, integración social pero también de avances en tecnología, entre otras, el CLEANTECH. En tan corto espacio de tiempo, Israel es reconocido en el mundo como el “Silicon Valley” de las Tecnologías del Agua. Si bien esta afirmación puede resultar un tanto obvia, no está de más recordarlo de vez en cuando y, de paso, ampliar datos acerca del mercado de las tecnologías limpias en Israel.

Ubicado en el borde de un cinturón desértico, Israel impulsó desde su creación como Estado** el desarrollo de tecnologías innovadoras que lo han convertido en líder mundial. El riego por goteo, la desalinización y el reciclado de aguas residuales son algunas de las pruebas de este liderazgo

** ”Israel requiere el estudio de la desalinización, la utilización masiva de energía solar, la prevención del desperdicio de agua de lluvia útil y la maximización de la potencia a través de turbinas de viento…»                  –David Ben Gurión, el ex Primer Ministro de Israel – 1955

 La industria mundial del Agua y las Tecnologías Limpias mueve más de 400 billones de dólares al año, y constituye uno de los mercados que registra mayor crecimiento. Israel ocupa un papel relevante en este entramado gracias a su know-how tecnológico, especialmente en los campos del agua y las energías renovables.

La gran escasez de agua en el país ha fomentado el desarrollo de tecnologías para optimizar su uso. Por citar un ejemplo, cabe destacar que Israel cuenta con la planta desalinizadora más grande del mundo.

En 2009 las Naciones Unidas publicaron un reporte donde indicaba que Israel lideró a nivel global el reciclaje y reusó un 70% de aguas residuales. Según datos del Ministerio de Medio Ambiente, actualmente, el agua desalinizada constituye un 25% del agua fresca del país y un 40% del agua potable para el sector doméstico.

Uno de los mayores desafíos que enfrentamos en las últimas décadas es la escasez de agua. El uso eficiente de las fuentes del agua se vuelve más urgente en el mundo globalizado, con la población creciente y la exigencia de más energía, dado que el agua se está agotando. La innovación tecnológica en el agua es vital. Hay muchos desafíos que superar en lo relativo a la escasez, el control, las instalaciones, la contaminación e incluso el uso de la misma.

Desde el punto de vista comercial, existen oportunidades de negocio en la gestión del agua en todo el mundo. En los países desarrollados, por ejemplo, tenemos la oportunidad de innovar en el control de riego agrícola y uso doméstico. En países emergentes podemos hablar incluso de transformar agua industrial en agua potable.

Israel, con su historia de innovación de tecnología limpia y una fuerza laboral activa de emprendedores y expertos llegada del ámbito del High-Tech local, tiene una clara ventaja en el desarrollo de la próxima generación de tecnologías limpias.  De hecho, ocupa el puesto nº2 en el Ranking Global de Innovación en Cleantech.

En cuestión de tecnologías de riego, más del 80% de la producción israelí es exportada, mientras las compañías israelíes copan el 30% del mercado global.

Estos datos, unidos a la tendencia mundial que señala a Israel como un gran exportador de todo tipo de tecnologías limpias y a las excelentes relaciones comerciales con Latino América, convierten al tándem ISRAEL – LATINO AMÉRICA en una alianza estratégica segura y con expectativas de éxito.

Son ya muchos los proyectos y colaboraciones en materia de cleantech que empresas israelíes desarrollan en Latino América pero, según responsables del Instituto Israelí de Exportaciones y Cooperación Internacional, aún hay mucho camino por recorrer. América Latina ofrece multitud de oportunidades aun sin explorar.